Cállate. La mordaza de Twitter España

qf1OXKXA_400x400.jpg

De un tiempo a esta parte, todo el mundo sabe que Twitter España está coordinado por familiares de la Casa Real, pero eso en principio es irrelevante.

Lo realmente escabroso es la política interna de contrataciones y las directrices actuales de la compañía en su representación en España.

Adelanto que todo lo que aquí se escribe es experiencia personal y que si alguien tiene más datos a aportar ruego lo hagan.

Todo empezó hace un mes cuando desde mi cuenta habitual desde 2011 reproché sin ninguna falta de respeto aparente a una cuenta dedicada al proselitismo fascista, que escribiese trolas.

A lo que un individuo seguidor de la misma me replicó de muy malas manera. Yo le respondí a sabiendas de la política y las reglas de Twitter para suspender cuentas. En el pasado ya tuve algún problema menor.

Al día siguiente Twitter suspende mi cuenta, que todavía no me han devuelto, argumentando que han detectado que mi cuenta está dedicada a fomentar delitos de odio, acusación muy grave y totalmente falsa. Tan falsa que es indemostrable que eso sea así. De hecho, me envían los siguientes tweets como «prueba»

yT16iIgQ

A la que el lector sea un poco hábil notará que no existe fomento de delito de odio (un juez alemán se reiría de ti si lo afirmases) y que quizá haya algún insulto velado, lo cual aceptaría como suspensión temporal en horas, pero nunca como fomento del delito de odio.

Bien, tras este incidente grave, usé el mecanismo que el mismo Twtter me brinda para enviar apelaciones. Al principio fueron muy educadas y rogativas. Pensé que quizá algún becario estaba cometiendo errores, ya sabes, el verano…
pero su respuesta siempre era esta.

2018-08-14 20_39_09-Case# 90891322_ Appealing an account suspension - @rafa_penya [ ref__00DA0K0A8._

Seguí rogando, apelando a que en esa cuenta tengo fotos, mensajes y a gente a la que quiero y no quiero perder. Se la sudó bastante.

Pasaban los días y la respuesta no cambiaba por lo que decidí enviarles recetas o textos que no tuviesen nada que ver para ver si había factor humano. La respuesta seguía siendo la misma.
Cabe destacar que el medio al que reproché su sarta de trolas, es conocido como

2018-08-14 20_41_19-Las Voces del Pueblo 🇪🇸 (@lasvocesdelpue) _ Twitter

y es de temática única y muy contrario al independentismo catalán. Ese «medio» lo coordina Jota (su nombre e identidad no es relevante) un ciudadano africano afincado en Barcelona (también irrelevante pero no deja de ser llamativo que sea facha)

Recordaréis a Jota por ser el que hizo una «noticia» que decía 2018-08-14 21_42_41-Un perro catalán _salta y muerde la pierna_ de una mujer de 45 años _ lasvocesde

Dejo el enlace aquí –> https://www.lasvocesdelpueblo.com/un-perro-catalan-salta-y-muerde-la-pierna-la-pierna-de-una-mujer-de-45-anos/

Como podéis leer, información objetiva y certera. De esa roll oMediterráneo Digital pero con menos gracia… Aquí su otro éxito

2018-08-14 21_44_06-Prisión para el catalán padre de Nadia, la madre y él estafaron 918.000 euros en

El padre de Nadia por cierto es de Valladolid, pero eso a Jota le da igual. Enlace aquí https://www.lasvocesdelpueblo.com/prision-para-el-catalan-padre-de-nadia-la-madre-y-el-estafaron-918-000-euros-en-donativos/

Bueno, en fin, que esa cuenta que se define como «información sobre el separatismo» lo que ostenta es una catalanofobia imperante, pero bueno, no es mi guerra.

Sigamos con el caso, sinteticemos, no nos vayamos por las ramas.

Servidor es catalán (vaya, haber empezado por ahí, ahora lo entiendo todo, chaval) .Y como tal viví en su día los palos de la poli el 1-O. Los vi, de cerca, vivo en Lleida. Y vi a gente de fuera, por la tele, animar a la policía para que fuese «a por ellos».

Personalmente el independentismo me la pela bastante, pero no me es indiferente el abuso a la gente, como a cualquier persona normal.

Bueno, pues esa defensa férrea de la gente me lleva a protestar (siempre cumpliendo leyes y normas, la prueba está en que aún no he sido denunciado por la vía legal) y claro, eso forma un estúpido efecto Mandela en el que cualquier mente cuadriculada de persona incapaz de limpiarse el culo sola podría percibir que yo soy independentista. Nunca he ostentado símbolos ni he declarado ser independentista. Sí votar a CUP, ERC, pero también a PSOE y a Podemos.

Ya tenemos un «motivo».

Seguimos. La persona a la que mando a tomar por culo (fácilmente podría haberla mandado a leer este blog, pero DELITO DE ODIO) resulta ser un funcionario del estado, en concreto de las fuerzas de seguridad. Y claro, son la Tormenta pero cuando se ponen sensibles…

Ya tenemos «el delito de odio».

Seguimos.

Un par de horas después, Twitter España suspende el resto de mis cuentas. Sí, todos tenemos más de una cuenta.

Servidor tiene una de 2012 y otra de 2016, además de la «oficial». Ambas cuentas zombi, incluso una de elles sobre un proyecto musical.

El argumento que esgrimen es que «podrían estar vinculadas a otras cuentas que fomentan el delito de odio». Cómo han averiguado eso? Fácil.

Las 3 cuentas tienen el mismo número de teléfono asociado. Por qué? Pues… por qué no? Esto demuestra que la sagacidad de los que ahora mismo llevan Twitter España y sus trabajadores es de peli de serie B.

Y no se equivocan, están asociadas a mi cuenta A, pero no a una cuenta que fomenta delitos de odio porque de ser verdad no vería mejor lugar para denunciarlo que por la vía penal PERO…

De querer fomentar delitos de odio JAMÁS me haría una cuenta asociando mi número de teléfono. Y MUCHO MENOS una cuenta donde me presento con MI NOMBRE REAL, MI CIUDAD, MI FECHA DE NACIMIENTO y FOTOS MÍAS REALES.
Pero qué clase de aprendiz de fomentador soy???? Incluso Gárgamel habría sido más discreto!!
Pero Vírgen de la Macarena, que la cuenta se llama @rafa_penya que es mi puto nombre (JAJAJAJAJA)

Y ni mucho menos asociaría el resto de cuentas. Todo eso es de primero de Villano de Marvel. Pero esta gente patina, patina mucho. Son monos con pistola (con el simil no quiero ofender a nadie y mucho menos a los monos). Gente a la que les dan el poder de bloquear cuentas siendo en su mayor parte personas con la perspicacia bajo mínimos.

Sigamos.

Con la cuenta A baneada durante casi un mes y sin poder «fomentar delitos de odio» se me ocurre crear un pequeño hilo de tuits en mi cuenta B donde sin cometer infracciones de reglas de Twitter (tuve especial cuidado) expongo mi asunto de la siguiente manera.

Como el lector puede ver, cito a arroba twitter España. Si hay alguien encargado de leer los tuits donde se cita a esa cuenta, pues lo habrá leído. Y si lo ha hecho, NO HABRÁ encontrado delito alguno.
Pero bueno, contemos con que Twitter es suyo y se lo follan cuando quieren y que si no quieres someterte a esas reglas pues vete al Quitter con la Barbi Japuta.
Al día siguiente, a las 9 de la mañana me aparece esto en mi cuenta B.

NOTA: la captura la he hecho a falta de 1 hora para el desbloqueo, pero esta mañana era 12 horas de suspensión

Screenshot_2018-08-14-19-34-37

«Hemos detectado que has incumplido las Reglas de Twitter» dicen. Esta vez no indican qué reglas son ni cómo evitarlas en un futuro.

Sigo contando con que el lector es avispado, inteligente y hábil. Por eso creo que hay poco que decir sobre esto. Que ya se sobreentiende bastante.

Con cierto malestar ya con esta situación decido probar a ayudar y asesorar a los 68 seguidores de mi cuenta C, por lo que hago un pequeño hilo donde ESTA VEZ NO CITO A TWITTER ESPAÑA.

2018-08-14 21_18_21-Paquete de Winston (@paquete_wisto) _ Twitter

Por favor, especial atención al tuit que está señalado en rojo, porque JUSTO todo este hilo le está dando la razón.

2018-08-14 21_20_38-Paquete de Winston (@paquete_wisto) _ Twitter

Cualquier lector espabilado o ya metido en leyes podría fácilmente estipular que estos tuits no incumplen normas y que son exponentes de la libertad de expresión.

Pero alguien ha decidido que no, que la libertad de expresión es lo que digan ellos.

Screenshot_2018-08-14-20-17-59

De nuevo no indican cuál es el problema, quizá porque no lo haya.

 

En resumen, que todo esto puede ser producto de mi mente paranoica o de que me creo que esto es Black Mirror o que tengo manía persecutoria, pero no. Esto va de que una red social multinacional ha dejado su representación en España en manos de personas con criterio determinado y muy muy parciales.

Como prueba, todos conoceréis el caso de FOROGC, que finalmente han tumbado porque si no se notaba demasiado. O cuentas vómito com ola de Herman Terch o miles más. Con el tema catalán están especialmente motivados.
No soy la primera persona sopeshosa de ser «sedicioso» «separatista» o «secesionista».

A día de hoy sigo sin mi cuenta, y todo apunta a que jamás la recuperaré. Mis fotos, mensjaes y tuits son propiedad de Twitter España y harán con ellos lo que quieran.

Insisto: NO INTERCAMBIEIS INFORMACIÓN POR DM, USAD TELEGRAM O SIMILARES. Usad Twitter para las risas y pasad desapercibidos. Es lo que quieren. La revolución habrá que hacerla por otras vías. A twitter ya lo hemos perdido hace años. Yo seguiré porque quiero estar con mis amigos, pagaré el precio, pero quedará constancia de el hecho.
Como prueba de que no me invento nada, voy a compartir este post de este blog por redes que no sean Twitter, sin embargo sí lo compartiré por DM. De ese modo veremos si leen los DM o no… así si suspenden mi cuenta de nuevo (sin incurrir en incumplimiento de reglas por otra vía) ya sabremos algo más.

Aunque me parece realmente injusto que una red social que FUE un sitio donde además de conocer gente, servía para sentirse libre se haya convertido en una mordaza brutal donde todo aquello que escribas sea revisado, espiado y juzgado y sentenciado incluso sin incumplir las leyes del Estado.

 

BONUS: estando mi cuenta B en suspensión temporal he recibido este simpático e-mail de Twitter.

sssssss

Amargo como la miel

Fíjate, eh? Todavía enfrascado en este tema, como obsesivo. Pero es que he descubierto que tengo una seria patología, me creo mitos, casi siempre basados en quimeras. Y aún así hay una cosa de la que tengo certeza.

No levanto cabeza emocional desde que permití que alguna de tus risas, tus sonrisas dejasen de estar dedicadas a mi al menos de vez en cuando.
No levanto cabeza porque sigues saliendo en mis mejores sueños. En los que me despierto sabiendo que eso es lo que quiero que me pase.

Ni un gilipolla sin Dulcinea. Pues yo también.

Y no es que añore según qué cosas, nada tangible, nada animal, que también. Lo que añoro es tu voz, tu acento, tu manera de hablar, tu modo de ver la vida, del que estaba aprendiendo. Cómo te admiraba, cómo deseaba estar, hablar, verte.
Creo que no supe que estaba perdidamente enamorado de ti hasta que no adquirí consciencia de cuánto he jodido mi vida siempre y en especial aquel regalo fugaz.

Ahora la movida es otra. Ahora solo quiero seguir viviendo sin el miedo, el pánico a ver alguna foto tuya, a saber que no soy un instante de tu vida porque eso me come el alma, me hace compadecerme de mi mismo.
Eso no puede pasar. Ni quiero, ni puedo, ni debo ignorar la realidad.
Por eso voy a dejar de pensar en mi ombligo y a volver a la tierra.

Además siento culpa, culpa que me pudre porque no he sabido ni he podido estar en tus peores momentos. Quizá porque alguna vez haya pensado que nunca has querido compartirlos. Culpa porque no he podido hacer por ti más de lo que debería.

Para acabar, no quisiera que esta confesión te sonase a oportunismo porque no lo es. Me  consume siempre, desde aquel entonces. Igual que cuando grabé una canción donde quería decirte lo que estaba sintiendo. Me intento consolar pero no lo consigo.

Me consume desde que me dijiste que la cosa no volvería a su cauce. Maldita sea, si a mi me basta con una jodida sonrisa, con que me reproches, que me insultes, que me culpes, que me digas qué te pasa. Me importa cada minuto de tu existencia, me importa más que yo mismo.

Te quiero. Te quiero porque te sigo sintiendo como un miembro fantasma. Y quizá al leer esto no te importe, pero si no lo escribo me voy a volver loco.

Y no. No pretendo, ni quiero, ni pido.
Pero mi terapeuta me ha recomendado que me exponga, que lo afronte, que rompa esta cárcel de cristal que me he creado.

Ojalá algún día me tires una piedra a la cabeza y me digas que me peine. Ese día algo cambiará en mi vida.

Y nunca dejaré de esperarlo.

La concreción de lo abstracto

abstraccion-fotomat-2012-01-04

Sigo intentando expresar las inquietudes con las más difíciles de las posibles palabras, con el más desconcertante léxico, con la sintaxis más cercana a la incorrección. Porque de ese modo, estoy seguro de que seguirán sin entenderme. Y posiblemente, en lo más profundo de mi subconsciente, sea lo que prefiero.

Tengo miedo de fiarme cada día más de los anuncios de la tele.
De masajearme el hipotálamo más de la cuenta…

Los ojos de Claudia (canción)

Los ojos de Claudia tienen
un brillo que nunca he visto antes

Me inundan el corazón me miran como si me mirase yo mismo.
Me llena de orgullo ser un hombre esta vez,
existir tras los ojos de Claudia

Los ojos de Claudia aun no existen pero hace ya tiempo que sueño con ellos.

Un día le contaré que estuve una tarde componiendo canciones,
para ella para Claudia,
arco iris en la nieve.

Con ella me sentiré, el hombre mas importante del mundo.
Me hará reir y llorar, llenando vacios con sonrisas.

Claudia es mi salvación
el sentido de mi vida
Un trozo de mi existencia en este mundo,
será una pequeña parte de Claudia

Si muero sin conocer el brillo de los ojos de Claudia
sabré que me iré al infierno, habiendo dejado cosas por hacer.

Si un día se seca el árbol, y Claudia no ha aparecido nunca
la parte mas negra de mi corazón
purgará toda su pena y su rabia
un fantasma errante, una sombra vil seré
un resto de humanidad.

Los ojos de Claudia me esperan en valles de caramelo
y campos de maíz
metida en su cama, durmiendo, para levantarse pronto
e ir al colegio.

Sus ojos
los ojos de Claudia
sus ojos
los ojos de Claudia

Los ojos de Claudia son, los más bonitos que he visto nunca.

El cuadro que había colgado en su habitación

El cuadro que había colgado en su habitación llevaba tiempo sin decirle nada. Le veía dormir todos los días y es posible que velara por él.

Hacía dos días que rompió su silencio y le preguntó:

– ¿por qué te afeitas ahora todos los días?

Y el hombre le respondió: eres un cuadro, ¿qué más te da?

– Sonries demasiado.
– ¿Y eso te molesta?
– Me desconcierta.
– Insisto, eres un cuadro, ¿qué más te da?

Oía su voz a traves del ruido de la ducha. Su discurso era imperceptible.

– Has perdido peso.
– ¿En serio? gracias.
– Era un reproche.
– Oh, que mal me siento – ironizó.

La imagen del cuadro permanecía quieta, mostrando el desaire que la convirtió en obra. No mostraba ningún signo de interés por el entorno.

– Pasas demasiado tiempo en el baño.
– Arreglar esto cuesta. Cosas de hombres.
– Los hombres no tenéis cosas.
– Desde luego, entiendes de hombres…
– Me pintó uno, como entenderás, algo tengo que saber…
– Siendo así, muchas de tus preguntas se responden por si solas.
– Digamos que me gusta charlar…
– Dime entonces, ¿porqué después de tanto tiempo sin hablar se te ocurre ahora someterme a un interrogatorio?.

Tras unos segundos de reflexión, el cuadro espetó:

– Que pregunta más tonta, solo soy un cuadro.

Cuento para niños: Un sueño pequeño

Hubo una vez, en un pequeño pueblo muy muy pequeño, un señor que medía cinco centímetros.

Le gustaba pasear por su pueblo durante todo el día, pero le disgustaba que fuese tan pequeño, porque se le acababa muy pronto.
Solía pasar por los mismo sitios más de cien veces y en cada una de ellas, saludaba a sus vecinos con alegría.

Los demás vecinos, también eran pequeñitos, y las puertas de sus casas eran también pequeñas.

Nadie conducía coches, si no bicicletas con cuatro ruedas, para no caerse hacia los lados.

Nuestro amigo de cinco centímetros, compraba el pan al otro lado del pueblo, a unos 30 metros.

Y sucedió que un día, en la biblioteca pequeñita del pueblo, encontró un libro muy muy grande, casi enorme, donde se hablaba de los pueblos que existían muy, muy, muy lejos, a 3 kilometros de distancia.

Pueblos donde la gente medía casi dos metros y conducían coches veloces y usaban aviones para volar y casi nunca paseaban, porque las calles eran muy muy largas y se cansaban de andar.

Se preguntó nuestro amigo, qué sería de el si se perdiese por un sitio de grandes avenidas y plazas gigantescas.

Cerró el libro muy muy grande y se acercó al barecito muy muy pequeño, para beberse un refresquito y hablar con sus amigos de las pequeñas cosas.

Por la noche soñó feliz y contento, que paseaba por aquellas capitales y que era muy alto y que podía pasear durante horas sin pasar por el mismo sitio una sola vez.

A la mañana siguiente, se levantó de su camita, se puso los zapatitos y se peinó con la raya al lado, como de costumbre. Salió a la calle y se puso a pasear.

…y colorín colorado, este cuento se ha acabado, si quieres que te lo cuente otra vez cierra los ojos y cuenta hasta tres.

Las pequeñas cosas…

He salido a la calle, esta vez con las gafas de ver de lejos.
La luz del sol me ha obligado a torcer el gesto de la cara. La luz era caliente.

No recordaba ya como era. He estornudado y he cruzado la calle pasando del semáforo.

Me he sentido un rebelde que iba contra el sistema, pero mi sueño se ha desvanecido cuando se ha puesto verde para los coches.
He corrido.

He querido pisotear los charcos de la lluvia de anoche, pero no recuerdo qué suavizante le ponías tú a la tuya y jamás volvería a oler igual.

De todos modos, siento gozo de ver como me afectan aun las pequeñas cosas.

Y me he vuelto a acordar entonces de ti…

La ira

La ira

Poder visceral
no justificado
de natural humano
renombrado a pecado

La ira.

Huír de ella, sintiendo vergüenza
quema tu sangre por miedo a tenerla
lobo herido, rabo entre las piernas
daño en el cuerpo, dolor en la conciencia.

La ira.

Explosión de fúria, miedo en los ojos
Fiera encerrada, candado y cerrojo.

La bestia se duele, vomita su odio.

Y llega la calma y con ella, serena,
la ira aplacada se vuelve pena.

La ira.

Rafa

Relato: «No hay moscas por la mañana»

Me imaginé mirando las fotos de toda una vida, e irremediablemente quise adivinar qué pensaba en cada una de ellas. Y tergiversé mi recuerdo en pos de un presente sereno.

Los amaneceres en verano son hermosos, de rojo intenso, salpicados por las siluetas de los primeros pájaros del día.

No hay moscas por la mañana.

El café hierve despacio, con calma, como un anciano recorriendo la distancia que va de Plaza Catalunya hasta los bancos que hay al lado de la boca del metro de Urquinaona.

Desde el interior de la habitación en silencio, a través de la ventana, la vorágine del gentío que empieza a invadir la calle supone una película cómica de principios del XX.

La mueca sarcástica es inevitable.

El chorro de la ducha silencia el tic tac del reloj que amenaza con marcar la hora en punto. La prisa la inventó un hereje, en tiempos de la inquisición.

El tarareo de cualquier canción promete que, al menos para mi, se prepara un buen día que solo será tiznado por el vaivén del vagón. La taquillera parece llevar allí 200 años.

En el tren la gente es anónima y vulgar. Vidas dispares, de índoles varias, se mimetizan hasta la llegada a la estación.

Y allí, la gran ciudad se alza, como se alzará siempre, después de que hayamos muerto.

Y recuerdas el título de aquella crónica de Olga Rodríguez «El hombre mojado, no teme la lluvia».

Y entre todo símbolo urbanita, canturreo por dentro:

“El gato que está triste y azul…”

Y solo las palomas parecen escucharme.

No. Ya no hay moscas por la mañana.